Estudiar Psicología me ha aportado grandes beneficios a la hora de conectar con las personas, especialmente en mi trabajo con emprendedores en la plataforma Emprendiendo Chile. Siempre he sido curiosa por naturaleza, por lo que al interactuar con los emprendedores me sumergía en investigar todos los aspectos de sus proyectos. Desde revisar sus perfiles y páginas web, hasta indagar en sus historias y conocer a sus equipos, me ayudaba a establecer un vínculo personal con ellos.
Gracias a mi buena memoria, podía recordar los nombres de cada emprendedor y sus productos con solo echar un vistazo a sus creaciones. Este primer acercamiento era clave para generar una conexión más profunda y cercana, dándoles la bienvenida de forma personalizada a cada uno de ellos.
Al momento de realizar publicaciones o redactar entradas en el blog de Emprendiendo Chile, siempre me tomaba el tiempo de leer las historias de los emprendedores. Conocer la forma en que se vinculan con sus clientes, el proceso para lograr las mejores fotos de sus productos e incluso sus desafíos y logros, me permitía transmitir de manera auténtica su esencia a través de nuestra plataforma.
Este enfoque en destacar no solo el producto en sí, sino también la historia y la pasión detrás de cada emprendedor, fue sin duda lo que marcó la diferencia en Emprendiendo Chile. Sabía que la plataforma estaba siendo y sería una vitrina local distinta, en la que no sólo bastaría con resaltar el producto en sí, sino también a la mente creativa y emprendedora que estaba detrás de él.
Por tanto, creo firmemente en la importancia de hacer las cosas con dedicación y excelencia. Conectar con las personas, comprender sus historias y mostrar empatía hacia sus esfuerzos, son elementos clave para generar vínculos sólidos y duraderos. En definitiva, estudiar Psicología me ha permitido no solo comprender mejor a las personas, sino también establecer relaciones más significativas en mi trabajo con emprendedores.